Nuestro hijo Gianfranco pasó dos temporadas en la Catequesis del Buen Pastor en la Iglesia de la Sagrada Famila, en Ottawa. Estamos felices de que Dios le haya dado esa posibilidad. La catequesis despertó en Gianfranco su interés por los signos de nuestra fe; le ayudó a responder muchas preguntas y a entender la historia detrás de nuestra creencia en Cristo. Y no sólo eso: Gianfranco nos explicó y nos dio respuestas a nosotros, sus padres, sobre muchas cuestiones que no sabíamos o que quizá habíamos olvidado: ¿por qué los colores de los tiempos litúrgicos? ¿Cuál es su significado? ¿Qué hay detrás de cada elemento del atrio?, entre otras dudas que nos fueron aclaradas por Gianfranco. Nuestra familia está muy feliz de haber tenido esta oportunidad y recomendamos sinceramente que los padres se animen a llevar a sus hijos a esta catequesis, que es un primer escalón sólido hacia la fe.

Durante dos años, nuestra hija ha participado satisfactoriamente en la Catequesis dominical del Buen Pastor (CBP), consideramos que es una formación religiosa especial para niños pequeños 3 a 6 años, en español, en un ambiente seguro y con una atención exclusiva, en grupos reducidos.
CBP le ha permitido a nuestra hija practicar valores tan importantes como la responsabilidad, el compromiso y la puntualidad sobre todo cuando se trata de un programa dominical matutino.
Nuestra hija ha recibido una formación práctica y experiencial basada en la Biblia, la Liturgia y en los principios de educación Montessori. Todo esto le ha permitido ir aprendiendo a escuchar, estar en silencio, meditar, entender que sucede en la misa y conocer a Jesús. Estamos seguros de que ha sido una experiencia significativa en la construcción de valores en la fe y sobre todo en la relación personal de nuestra hija con Jesús.
Gracias y bendiciones

Dos de mis hijos asistieron a la Catequesis del Buen Pastor. He notado que entienden un poco más la misa y se comportan mejor durante ella. Les entusiasma ver lo que hace el padre. En una ocasión para sorpresa mía, mi hijo mayor me pidió permiso para ver la misa desde la puerta donde podía ver mejor todo lo que el padre hacía en el altar. Durante Semana Santa les explique con un cierto temor como Jesús había muerto crucificado. Pensé que hablarles de ese tema los asustaría un poco. Pero muy por el contrario ellos ya sabían todo al respecto y mi hija de tres años añadió con mucha alegría: ¡y resucito! Me sorprendió mucho porque lo entendían con mucha naturalidad. Ellos también me comentaban sobre los colores litúrgicos. Sabían que color vestiría el padre ese domingo y sabían por ejemplo que estábamos en tiempo ordinario. En un par de ocasiones me quedé con ellos y pude ver la dinámica del método Montessori el cual es excelente y los incentiva a trabajar independientemente, reforzándoles la seguridad en ellos mismos. Por ejemplo, al llenar y vaciar las vinajeras de vino y agua. A pesar de que eran de vidrio y estaban con agua mi hija las tomo y trabajó con ellas vaciando el agua y el vino una y otra vez. Luego las cargó en una bandeja y las puso donde las encontró. Yo intenté ayudarla, pero se me recordó que ella debía hacerlo sola. Una tarea a veces no tan fácil de hacer para una madre, al menos no para mí. Dejarla ser y dejarla aprender sola con posibilidades de error, pero suyos. Ellos sabían dónde estaba cada cosa, tomarlas usarlas y guardarlas. Ver a todos los niños en conjunto usando los materiales era impresionante. También forjaron nuevas amistades y aprendieron nuevas canciones. Yo la verdad lo recomiendo a todos los padres católicos sobre todo si es para nuestros hijos. Es realmente un regalo del Señor para ellos.

"Nuestra esperiencia en la catequesis del Buen Pastor fue muy enriquecedora, nuestros niños aprendieron de una forma dinamica lo cual ayudo a incrementar su interes y su curiosidad en el programa, concideramos que los niños orientados en valores cristianos serán los pilares de un mundo mejor.

A travez de este programa también conocimos familias muy bellas e hicimos lazos de amistad muy bonitos. Recomendamos esta esperiencia para todos los chiquis!!" :)

La Catequesis del Buen Pator, CBP tuvo un impacto positivo en mi hija Lucia al igual que a en nuestra familia, Lucia atendio la CBP por dos años consecutivos (Pie de Atrio como ella le llama). La CBP tiene un excelente enfoque para enseñar la Fe a temprana edad, es una una exposición adecuada a una educación católica significativa para los niños.

Lucia desarrollo una relación personal con Jesus desde el principio de la Catequesis. ella internaliza y aplica mensajes de CBP desde el comienzo y hasta la fecha. La Catequesis del Buen Pastor hace que los niños puedan practicar la fe cristiana en cuerpo, mente y espíritu de una manera super dinamica y entretenida. Los niños no se aburren.

A travez de este programa los padres de familia de los niños hicimos amistad que perduran hasta la fecha, asi que todos nos hemos enriquecico con la CBP